The Soundtrack Engine

Seguro que tienes algo mejor que hacer...

miércoles, 30 de abril de 2014

Niemöller Reloaded

Primero fueron a por los funcionarios, pero no dije nada porque no era funcionario.

Luego fueron a por la Sanidad, pero no dije nada porque no estaba enfermo.

Después fueron a por los que cobran prestación por desempleo, pero no dije nada porque no estaba en el paro.

Luego fueron a por los preferentistas e hipotecados, pero no dije nada porque yo no tenía esos problemas.

También fueron a por las mujeres que querían abortar, pero no dije nada porque eso no es cosa mía.

Más tarde fueron a por quienes cobraban becas de comedor y estudios, pero no dije nada porque ese tema a mí no me afectaba.

Finalmente vinieron a por mí; pero para entonces los comedores sociales ya estaban saturados por toda la gente anterior y no pude entrar.

jueves, 24 de abril de 2014

Con sangre entra

Ayer, día del libro. El abajo firmante y su familia salen a pasear por la céntrica zona de la ciudad donde las librerías ponen tenderetes y exponen productos y algunos autores de diverso reconocimiento se asoman a la intemperie para firmar ejemplares de sus libros y darse el publicitario baño de masas que tan bien suele venirles. Y también hay gente. Mucha gente. La suficiente como para no poder esquivarla sino introducirte en la marea y dejarte llevar. Be water my friend.

El caso es que en esas situaciones, quieras o no, siempre llegan a tus oídos retazos de conversaciones ajenas, apenas dos o tres segundos de efecto doppler que se desvanecen de la memoria en el momento justo en que llega la siguiente. Y así se iba pasando la tarde hasta que una de esas breves lonchas de conversación se me quedó grabada más tiempo del esperado. Más o menos era como sigue:

Madre contestando a hijo preadolescente acerca de algo que debió comentarle un instante antes de cruzarnos:
-… pues si no te gusta leer, hijo, más vale que te apuntes a Ciencias. Porque en Ciencias aún podrás algo, pero si te decantas por Letras, si no te gusta leer, lo pasarás mal…

Y me quedé por un momento algo evadido de la realidad, mientras asimilaba el alcance de esas palabras. Si te gusta leer, puedes estudiar algo de Letras. Si no, obviamente, pues solo puedes ir a Ciencias. Y, como dicen que dijo Mouriño, yo me pregunto ¿por qué?

¿Por qué todavía esa diferenciación entre Ciencias y Letras? ¿Alguien apasionado por la física no puede leer? ¿Un absoluto alocado por la historia de Europa no puede tener afición por la naturaleza? Es más: ¿acaso si ese niño acaba en “Ciencias”, no tendrá que leer apuntes o libros de texto o documentación?

Yo soy de los que piensan que si un a niño “no le gusta leer”, realmente lo que sucede es que aun no ha encontrado un libro que le guste. Ahí está el reto. No en dirigirle por el fácil camino en que no necesite comprensión de lectura y solo se preocupe por el futbol y el calimotxo. Vale, igual esta afirmación es muy cómoda y demagoga, pero qué se le va a hacer. La idea transmitida por esa señora de que el hecho de leer, así en general, es objeto de gusto como a quien le puede gustar la música folk o los macarrones deconstruídos, pues me ha parecido bastante fatal. Lo único bueno de todo esto es que miren, me ha dado para un post.

En fin, esperemos que el chaval encuentre la afición aunque sea con los volúmenes extra de Don Miki.

PD: Y me resulta algo incoherente que mucha de esa gente que tranquilamente afirma que “no le gusta leer”, luego son los primeros de tragarse hasta las pruebas de impresión del Marca. Cosas veredes…