Ayer tuve uno de esos días que espero no volver a tener en mucho tiempo, o al menos cobrar un pastón por ello. Nada realmente especial, solo una serie de acontecimientos normales, encadenados de tal forma que terminé la jornada agotaditooooo.....
De 6 a 2, pues currando, como suele ser habitual. Llegar a casa, comer deprisa y...- Ponerme a fregar, acabando con el tiempo justo para....- Recoger al chico del colgio (vale, sí, friego muy despacio...), lo que terminé con el tiempo justo para...- Ir a la compra (maldición, se ha dormido el chico así que tendré que llevarlo en la silla), lo que terminé con el tiempo justo para...- Llevar los gatos al veterinario, lo que terminé con el tiempo justo para...- Ir a comprar lo que se me había olvidado (vale, soy un desmemoriado, pero al menos con el traqueteo el chaval se despierta), lo que terminé con el tiempo justo para...- Ir a buscar a mi Dama, lo que terminé con el tiempo justo para...- Bañar al chico, lo que terminé con el tiempo justo para...- Darle su cena, y a continuación cenar nosotros. Y una vez hecho eso, comprobar que ya es lo suficientemente tarde como para no poder reposar la cena tranquilamente. Así que a la cama.Pero no termina ahí la cosa, no... el chaval estaba especialmente incordiante, y hoy le apetecía dormir con nosotros, cosa que intentábamos evitar ignorando sus cada vez mas elevados y guturales berridos. Mientras intentaba buscar una soluciones a este conflicto, varias de las cuales incluían derramamiento de sangre, el esfuerzo del chaval llegó a su punto de no retorno y se puso a vomitar. Halaaaaa, a levantarse, a limpiar, a cambiar sábanas, fregar el suelo e ignorar el aroma a jugos gástricos que inundaba la casa. Todo esto mientras el colega se reía desde nuestra cama, único sitio limpio donde poderlo dejar, y objetivo final de su jugada maestra. Que bonito es ser padre.
Mas la alegría le duró poco; una vez todo limpio, lo volvimos a emplazar en su sitio. Aunque intentó poner de nuevo en práctica su ataque, estábamos muy cansados como para hacerle demasiado caso (al menos yo), y finalmente cedió al ataque de Morfeo, dejándonos dormir por fin, en mi caso algo mas de cinco horas...
Mientras escribía esto, pensaba hacer el típico chiste escatológico acerca de que ayer solo pude descansar un ratito mientras estaba sentado en el inodoro, durante mi momento All-Bran, pero acabo de acordarme que, joer, ni siquiera tuve tiempo de ir al baño... Maldición eso quiere decir que toda la energía negativa del momento vendrá a mí y me hará echar a correr en el momento menos oportuno.... ¿qué es eso?... estoy teniendo visiones, como una aparición... veo a José Coronado descendiendo de los cielos, con un perro de Scottex en una mano y un yogur lleno de bífidus en la otra.... ooops, creo que tengo que acabar aquí... ....¡¡¡¡abran pasooooooooooo!!!!.......